Bogotá, un metro más cerca de las estrellas
Homo UrbanisPor Sentido Común
martes 6 de noviembre de 2007 0:03 COT
Electo el nuevo alcalde de la ciudad y decantados los hechos políticos que precedieron su elección, el tema sobre el tapete es el cumplimiento de su programa de gobierno, dentro del que se destaca, sin lugar a dudas, la primera línea del Metro de Bogotá, del que muchos hablan, pero pocos conocen.
Innumerables estudios de factibilidad y trazado se han realizado desde hace más de tres décadas, ante la necesidad de la ciudad de contar con un sistema de transporte masivo a la altura de los estándares mundiales en materia de movilidad, de los cuales nos alejamos cada día más, a punta de tanta buseta, colectivo y ejecutivo, a cual más de humeantes. Un prolongado presente que debemos relegar al pasado, superando, de una vez por todas, la increíble resistencia de algunos ciudadanos al progreso de la ciudad, al logro del principal aporte del Metro: mayor calidad de vida.
Pronunciada la palaba movilidad, aclaremos al lector neófito que este término, tan en boga últimamente, encierra un concepto mucho más amplio y complejo que la palabra transporte; mientras transporte se refiere cuantitativamente al medio, movilidad tiene una connotación más cualitativa. Existe prácticamente una ciencia alrededor de la movilidad, la cual se encarga de estudiar los desplazamientos urbanos e interurbanos, los medios y las frecuencias con que los habitantes de una ciudad se movilizan hacia sus destinos para realizar alguna actividad específica, y las condiciones y tiempos en que ello ocurre. De este modo se estructura y articula un sistema masivo de transporte con todos los sub sistemas que complementan al Metro, donde Transmilenio sería una arteria alterna, lastimosamente no muy bien planificada con respecto al Metro, pero si un complemento de buena calidad, susceptible de mejoras.
Contexto mundial
La palabra metro es una abreviación de tren metropolitano, y tiene su origen justamente en la popularización del sistema férreo y su adopción como sistema de transporte entre cercanías y al interior de la ciudad. El Metro no es un sistema nuevo, ni mucho menos. El de Londres, cuya primera línea se inaugura en 1863, puede considerarse el primero del mundo, siguiéndole en antigüedad los metros de casi todas las capitales europeas, construidos durante el siglo XIX y comienzos del XX. Quizás los metros de Londres, París (1900) y New York (1904) sean los más emblemáticos del mundo, aunque en volumen de pasajeros transportados le superan los metros de Tokio, Moscú, Seúl y Ciudad de México.
La entrada en servicio de los primeros Metros marcaría el inicio de una nueva cultura del transporte, en la cual se movilizan millares de pasajeros por hora, con un gran nivel de eficiencia y seguridad. A lo largo del siglo XX, poco a poco las grandes urbes de la tierra terminan adoptando esta modalidad de transporte, ya sea subterráneo, por superficie, elevado o mixto.
La primera ciudad hispanoamericana en contar con un metro, el Subte, es Buenos Aires (1913), antes incluso que Madrid (1919) y Barcelona (1924). Ciudades como México D.F. (1969), Sao Paulo (1974) y Santiago de Chile (1975) disfrutan hoy de un sistema de Metro bien consolidado, a las que le siguieron Belo Horizonte, Brasilia, Recife, Porto Alegre, Guadalajara y Caracas en los 80’s, y Monterrey, Medellín y Lima en los 90’s y comienzo del presente siglo, junto con Salvador (Brasil), Valparaíso, Concepción, los Teques, Valencia, Maracaibo, San Juan de Puerto Rico, Santo Domingo de Guzmán. Bogotá, con más de 6 millones de habitantes, es la gran ausente.
Planificación y movilidad
El Plan de Ordenamiento Territorial de Bogotá (2000) establece la que deberá ser la primera línea de Metro, que consta de 29.34 kilómetros de línea férrea, 24 estaciones de pasajeros, dos patios talleres y un conjunto de sistemas de soporte de energía, señalización, y telecomunicaciones. De acuerdo con este Decreto local de obligatorio cumplimiento, la primera línea del Metro se desarrollará en dos etapas, durante un período de 9 años, contados a partir de la aprobación del POT (año 2000). Toda vez que las dos Administraciones que sucedieron a la de Peñalosa no adelantaron los estudios necesarios para iniciar las obras, en 2009 no estará lista la primera línea, pero aprovechando la voluntad política del nuevo alcalde, la ciudad estará avanzando en el camino de tener un decoroso sistema integrado de transporte. El primer paso será la gestión de los recursos necesarios, en la cual ya ha habido importantes avances, sin aún comenzar el gobierno de Moreno. Seguirán los estudios de factibilidad y técnicos, que en parte serán actualizaciones de otros ya realizados antes.
Existe alguna inquietud por el sistema escogido y por los corredores que serán utilizados por este proyecto, pero si para la movilidad existe una ciencia, para el Metro existe toda una industria especializada, capaz de planificar, diseñar y construir sistemas apropiados y eficientes, como lo es la última línea del Metro de Santiago de Chile, cuyo costo por kilómetro resultó comparativamente menor que el valor de un kilómetro de Transmilenio. El gran reto de la Administración Moreno será estudiar apropiadamente estas variables, para adoptar lo que mejor le convenga a la ciudad, incluidos por supuesto, los aspectos financieros y contractuales.
Todo ciudadano puede y debe constituirse en veedor de este gran proyecto; pero antes resulta muy importante que comencemos a pensar en grande, sin mezquindad ni complejos tercermundistas, partiendo de la convicción de que mañana podremos contar con este generador de calidad de vida, que pondrá por fin a Bogotá a la altura de cualquier capital del mundo de hoy, un metro más cerca de las estrellas.
martes 6 de noviembre de 2007, 13:47 COT
Aplaudo desde España la iniciativa del metro de Bogotá, aunque sólo sea por las dimensiones y población de la ciudad y su Área Metropolitana. Pero que nadie espere que las herramientas – modos de transporte – solucionen los problemas de movilidad, ya que, del mismo modo que la construcción de nuevas infraestructuras viarias incrementan los flujos de transporte no colectivo hacia y desde las ciudades, modos de transporte tan potentes como el metro fomentan las “microdeslocalizaciones” industriales hacia la periferia y con ello generan mayores necesidades de medios de transporte para una movilidad necesaria pero browniana, en la que entran tantos como salen a las mismas horas del día. La solución a los problemas de la movilidad viene con la toma de enérgicas decisiones políticas que vinculen la producción industrial, los usos del suelo y la vivienda, de tal modo que aquellos que obligan a mayores necesidades de movilidad de la población (trabajadores, consumidores), paguen parte del coste público que dichas circunstancias generan, o en el peor de los casos, se prohiban ciertas actuaciones que atenten contra un uso racional del suelo
viernes 9 de noviembre de 2007, 01:13 COT
Juanjo: Lo que anota es una verdad clara. El metro no es tampoco la panacea, pero si usted conociera de cerca el caótico escenario del transporte público en Bogotá, aplaudiría con más fuerza la iniciativa en marcha. Saludo,
SC
viernes 9 de noviembre de 2007, 03:48 COT
Desde el punto de vista de alguien que conoce de cerca el caotico escenario del transporte publico de Bogota, no aplaudo con fuerza la iniciativa, Me parece que seria mucho mas importante ensenarle a la gente a usar un paradero de bus y pagar por el transporte que usan (cuanta plata se gasto en armar fortalezas en cada estacion de transmilenio para forzar a la gente a hacer eso?).
Por otro lado el metro no es un generador de calidad de vida (suena lindo como slogan, pero nada mas).
Por ultimo, aunque Bogota tenga metro, todavia estara lejos de estar a la altura de cualquier capital del mundo (en serio alguien cree que eso es posible en el futuro cercano de Bogota!?), habria que resolver antes cosas como, hmmm no se, el acceso a agua potable, por ejemplo.
viernes 9 de noviembre de 2007, 18:55 COT
Ovidio: Me parece que escribió su comentario en un momento depresivo, de aquellos en los que vemos todo negro. Cuando disponga Bogotá de un transporte eficiente y civilizado, como lo es en buena parte Transmilenio, usted mismo entenderá los beneficios que representa para los ciudadanos una buena movilidad. Medellín ha construido toda una cultura urbana a partir de su metro, al que todos paisas ven con orgullo. Solo vaya a Medellín y monte en el metro, luego hablamos.
Las prioridades no se ordenan para satisfacer primero una y luego otra. Agua potable y movilidad son parte de la calidad de vida que ofrece o no una ciudad, y no podríamos esperar a que hubiese un cubrimiento 100% de la primera para empezar a resolver el problema estructural de movilidad que tiene Bogotá.
Ahora que el metro comienza a ser una realidad, dejemos que los expertos organicen la ciudad, y no nos quedemos pensando que a cambio de unmetro es mejor pintar y tapizar las busetas. Por favor, Ovidio, métale sentido común.
Saludo,
SC
domingo 11 de noviembre de 2007, 00:02 COT
[…] anterior viene de la mano con la actual discusión acerca de la construcción del Metro en Bogotá. Por un lado, se decía que su […]
lunes 3 de diciembre de 2007, 09:05 COT
me parece muy bueno lo del metro de bogota ya que si en algun lugar es necesario es alla por lo del transporte.
ojala que lo puedan tener y pronto
viernes 7 de marzo de 2008, 00:30 COT
PUES COMO BOGOTANO Y CAPITALINO CONSIDERO Q BOGOTA D.C LA CAPITAL NECESITARIA CON URGENCIA UN METRO PS YA Q AL SER LA CIUDAD MAS IMPORTANTE DE COLOMBIA ES NECESARIO Q LOS CAPITALINOS TUBIERAN UNA MEJOR CALIDAD DE TRANSPORTE MI OPINION ES Q CHATARRISEN ESA MANO DE BUSETAS BIEJAS Q RONDAN POR LA CIUDAD Y Q EL SERVICIO PUBLICO FUERAN TRANSMILENIO,TAXIS Y EL GRAN ESPERADO METRO GRACIAS/BOGOTA DISTRITO CAPITAL.
jueves 20 de marzo de 2008, 01:59 COT
SamuEl paisa:
Gracias por sus buenos deseos para Bogotá.
Jonathan:
Lo felicitamos por su bogotana conciencia.
lunes 21 de abril de 2008, 11:20 COT
¿Cómo solucionar a futuro, con eficiencia y economía, los problemas de contaminación y congestión vehicular
en las grandes ciudades?
Existe un nuevo sistema de transporte masivo limpio, llamado TranXRail o transporte por riel aerosuspendido, el que por sus bajos costos de: construcción, montaje, operación y mantenimiento es mucho más económico, rentable y eficiente que los sistemas convencionales.
Los Metros valen más de lo que se sabe.
Cuando se piensa en grandes soluciones para grandes problemas de contaminación y congestión vehicular en las grandes ciudades, se opta por sistemas Metro ya que estos tienen alta capacidad de movilización de pasajeros ( desde 40.000 usuarios /hora ) y sus costos varían entre 50 y 350 millones de dólares por kilómetro, dependiendo de su complejidad.
Pero analizando la “letra menuda” nos encontramos con los siguientes problemas:
Los Metros, por su alta capacidad, no disponen de la mayoría de sus potenciales pasajeros cerca de sus estaciones, los usuarios difícilmente renuncian al bus que pasa por su puerta o a su automóvil particular para caminar más de doscientos metros desde su sitio de origen para abordar los trenes en las estaciones del Metro, o desde estas hasta su destino final, por eso, tienen que implementarse, adicionalmente, al sistema Metro, otros sistemas de recolección o acopio para la mayoría de los usuarios que no están cerca de las estaciones, los que tienen que ser llevados a ellas para abordar el metro y luego ser transportados desde su estación de destino hasta el sitio de su destino final. Estos procesos de acopio y reparto deben realizarse por medio de otros sistemas de transporte secundarios, que son los Sistemas Integrados o alimentadores. Lo anterior, quiere decir, que un sistema Metro de alta capacidad no es funcional SOLO, porque hay que tansporterle los usuarios con otros sistemas, debido a ello, los Metros cuestan realmente muchisimo más de lo que se invierte en ellos, porque también hay que tener en cuenta a cuanto ascienden los costos: ambientales, de construcción, adquisición, montaje , operación, mantenimiento, accidentalidad y reposición de los sistemas alimentadores.
Porque no pensar mejor en sistemas a los que no haya que llevarles los usuarios, sino en sistemas que sean ellos los que lleven a los usuarios, y que además nos resulte mucho más económico y eficiente.
Los Metros pesados, están mal diseñados, porque están concebidos para concentrar, con la ayuda de otros sistemas, a muchísimos pasajeros en una sola línea arteria, por la que no habría necesidad de mover tanta gente, si más bien se implementan varias líneas paralelas e intercomunicadas de sistemas más livianos, menos concentradas, más espaciadas, cubriendo mayores áreas, por donde si está la gente y por donde circulen vehículos más rápidos, más pequeños, más amables, más cómodos, más altos, más frecuentes, más panorámicos y mucho más económicos, como los del sistema TranXRail.
Metro Vs. TranXRail
Con los recursos con los se construye 1 km. de un METRO se pueden construir hasta 10 Km. de TranXRail.
La construcción de un sistema Metro exige muchos costos directos e indirectos y mucho tiempo para demoler y reconstruir la franja de la ciudad por donde pasará.
La construcción del nuevo sistema no requiere demoler nada y se monta sobre las vías ya existentes en tiempos 10 veces menores.
El Metro por sus altísimos costos NO es rentable y tiene que ser subsidiado por el estado, el sistema TranXRail por sus bajos costos es altamente rentable y puede ser construido y operado por inversionistas privados.
El aerosuspendido es un sistema moderno, inteligente, computarizado, eléctrico, silencioso y mas eficiente por su velocidad y confort.
Existen alternativas mucho mas modernas y económicas que el METRO.
El aerosuspendido es el transporte público masivo del futuro.
Por sus altísimos costos y su poca flexibilidad los metros pesados serán anacrónicos muy pronto.
TranXRail es un nuevo y futurista sistema de transporte público masivo, limpio y económico
La congestión vehicular y la contaminación ambiental producto de los sistemas de transporte público convencionales, son problemas que tienen que ser atacados con decisión y creatividad por los mandatarios de las grandes ciudades, los que tienen que apartar su mirada de los anacrónicos y costosísimos sistemas convencionales que no pueden resolver los retos del futuro. El nuevo sistema aerosuspendido es la mejor alternativa. Los costos del TranXRail, varían entre 5 y 8 millones de dólares por kilómetro.
lunes 16 de junio de 2008, 20:29 COT
Yo parto desde el punto de vista de que una ciudad tan emblemática para hispanoamérica debe tener un medio de transporte masivo, práctico y viable como el metro.
Bogotá no debe quedarse atrás de ciudades secundarias del continente y debe hacer eco no a un estatus jerárquico absurdo sino a su necesidad.
Eso es tanto como pensar en que Medellín (ciudad donde vivo, por si acaso soy de dosquebradas) hiciera otra línea de metro sólo para que afuera digan que es uno de los más largos y no para satisfacer las necesidades de una población creciente.
BOGOTÁ NECESITA UN METRO Y ESPERO QUE LO HAGAN, PORQUE TIENEN COMO.
ADELANTE BOGOTANOS, LOS APOYO!!!
viernes 27 de junio de 2008, 11:02 COT
¿Cómo solucionar a futuro, con eficiencia y economía, los problemas de contaminación y congestión vehicular en las grandes ciudades?
Los Metros valen más de lo que se sabe.
Cuando se piensa en grandes soluciones para grandes problemas de contaminación y congestión vehicular en las grandes ciudades, se opta por sistemas Metro ya que estos tienen alta capacidad de movilización de pasajeros ( desde 40.000 usuarios /hora ) y sus costos varían entre 50 y 350 millones de dólares por kilómetro, dependiendo de su complejidad.
Pero analizando la “letra menuda” nos encontramos con los siguientes problemas:
Los Metros, por su alta capacidad, no disponen de la mayoría de sus potenciales pasajeros cerca de sus estaciones, los usuarios difícilmente renuncian al bus que pasa por su puerta o a su automóvil particular para caminar más de doscientos metros desde su sitio de origen para abordar los trenes en las estaciones del Metro, o desde estas hasta su destino final, por eso, tienen que implementarse, adicionalmente, al sistema Metro, otros sistemas de recolección o acopio para la mayoría de los usuarios que no están cerca de las estaciones, los que tienen que ser llevados a ellas para abordar el metro y luego ser transportados desde su estación de destino hasta el sitio de su destino final. Estos procesos de acopio y reparto deben realizarse por medio de otros sistemas de transporte secundarios, que son los Sistemas Integrados o alimentadores. Lo anterior, quiere decir, que un sistema Metro de alta capacidad no es funcional SOLO, porque hay que tansporterle los usuarios con otros sistemas, debido a ello, los Metros cuestan realmente muchisimo más de lo que se invierte en ellos, porque también hay que tener en cuenta a cuanto ascienden los costos: ambientales, de construcción, adquisición, montaje , operación, mantenimiento, accidentalidad y reposición de los sistemas alimentadores.
Porque no pensar mejor en sistemas a los que no haya que llevarles los usuarios, sino en sistemas que sean ellos los que lleven a los usuarios, y que además nos resulte mucho más económico y eficiente.
Los Metros pesados, están mal diseñados, porque están concebidos para concentrar, con la ayuda de otros sistemas, a muchísimos pasajeros en una sola línea arteria, por la que no habría necesidad de mover tanta gente, si más bien se implementan varias líneas paralelas e intercomunicadas de sistemas más livianos, menos concentradas, más espaciadas, cubriendo mayores áreas, por donde si está la gente y por donde circulen vehículos más rápidos, más pequeños, más amables, más cómodos, más altos, más frecuentes, más panorámicos y mucho más económicos, como los del sistema TranXRail.
domingo 20 de julio de 2008, 15:10 COT
En toda mi vida, siempre he visto y vivido los agotadores y muy tragicos trancones que encontramos en Bogotá, aunque se ha intentado transformar positivamente el transporte, todavia le hacen falta inumerables y necesarios cambios, por lo tanto el transmilenio como el metro, son en gran parte la solución, estos no seran el areglo de todos los problemas, pero encontraremos una mejoria significante en nuestro criticado trasporte, solo les digo que tengan un poco de paciencia con este mejoria, ya que también esta por construirse el tren de cercanias y el gobierno esta haciendo todo lo posible por chatarrizar los buses viejos.Por eso es que yo afirmo que este sistema es muy necesario como obligatorio para una ciudada como Bogotá, la que en un fúturo(eso si no cercano), se va aconvertir en la capital más importante de latinoamerica.
viernes 1 de agosto de 2008, 08:20 COT
una buena pagina con estudios sobre el impacto del metro en bogota http://www.metroenbogota.com